La inmunoterapia para tratar la diabetes tipo 1


Por Top Market Access, miércoles, 10 de abril de 2024


Contemplar la diabetes más como enfermedad autoinmune que metabólica da pie a innovadoras terapias de inmunoterapia de bajo riesgo en vez de con insulina.

La diabetes supone una creciente carga asistencial mundial tanto para los afectados como para sus familias y sistemas sanitarios. Según los datos del Atlas de la Diabetes de la Federación Internacional de Diabetes (FID), el 10,5% de la población mundial adulta (de entre 20 y 79 años) tiene diabetes, y casi la mitad desconoce que padece esta enfermedad.

Las previsiones de este organismo para 2045 indican que 1 de cada 8 adultos, aproximadamente 783 millones, vivirá con diabetes, lo que supone un aumento del 46%. 

En este momento, más del 90% de los diabéticos padecen diabetes tipo 2, relacionada con factores socioeconómicos, demográficos, medioambientales y genéticos. La diabetes tipo 1, que afecta al 10% de la población diabética, supone aproximadamente 1 de cada 10 casos de diabetes en España, estimándose una prevalencia en la población general del 0,2% (unas 90.000 personas). Se trata, además, de un tipo de diabetes con necesidades de tratamiento específicas y complejas.

La insulina sigue siendo, desde hace casi cien años, la protagonista indiscutible del  tratamiento de la diabetes tipo 1 (DT1), aunque, desgraciadamente, "no proporciona un control glucémico satisfactorio en la totalidad de los afectados y sigue habiendo una importante necesidad insatisfecha de nuevos tratamientos para la diabetes tipo 1 (DT1)", según reconocía recientemente en una publicación Colin M. Dayan, del Grupo de Diabetes y Autoinmunidad de la Facultad de Medicina de la Universidad de Cardiff (Reino Unido), quien durante su conferencia de inauguración del XXXV Congreso Nacional de la Sociedad Española de Diabetes (SED), que se celebra en Granada, ha resumido los resultados de los principales ensayos en marcha centrados en la prevención de la DT1.

PRESERVAR CON INMUNOTERAPIA DE BAJO RIESGO 

Una de las premisas es que preservar la función de las células beta con inmunomodulación ofrece la posibilidad de facilitar el tratamiento con insulina y/o prevenir la necesidad de insulina, particularmente cuando se trata de nuevas inmunoterapias de bajo riesgo. Así, en su conferencia ha hablado de una innovadora aproximación a la DT1, más como enfermedad autoinmune que metabólica, analizando riesgos y ventajas de tratarla con inmunoterapia en lugar de insulina.

En ella, ha subrayado la necesidad de cambiar el manejo de esta enfermedad mediante el uso de inmunoterapia de bajo riesgo, con el objetivo de preservar la función endógena de las células beta y facilitar sustancialmente el control metabólico. De esta forma, asegura, "la insulina y/o el reemplazo de células beta (células madre o trasplante) deberían considerarse en el futuro terapias de rescate reservadas para presentaciones tardías".

Ha destacado la reciente aprobación del fármaco teplizumab "para retrasar la necesidad de insulina entre 2 y 3 años, sobre todo porque es el inicio de una nueva era; de hecho, "hay al menos otros siete fármacos que también tienen efectos beneficiosos y deberían poder prolongar aún más este período. No cabe duda que ya es posible retrasar la pérdida de células productoras de insulina con bajo riesgo para los pacientes y, además, ahora podemos extender este período de 'T1 sin insulina' por más y más tiempo".

Para Colin, y teniendo en cuenta los resultados que se van conociendo de estos estudios, se presentan nuevas y revolucionarias tendencias en la prevención de la diabetes tipo 1. "Debemos pensar en cómo evaluar a los familiares de primer grado de personas con DT1 -que tienen un riesgo 10 veces mayor-, y más tarde a la población general, para detectar la diabetes tipo 1 preclínica (utilizando autoanticuerpos de los islotes), antes de que se pierdan demasiadas células productoras de insulina".  

NUEVOS AVANCES TECNOLÓGICOS 

Además de los avances en terapias dirigidas a la prevención de la enfermedad a través de la inmunoterapia -ya con un fármaco disponible que puede retardar el diagnóstico de DT1 una mediana de 2 años en personas de alto riesgo-, "se están desarrollando nuevas insulinas y sistemas de administración que facilitan este tratamiento en personas con diabetes tipo 1", resalta Antonio Pérez, presidente de la SED.

El experto también destaca las mejoras en la exactitud y precisión de los sistemas de monitorización continua de la glucosa y en lo que se conocen como sistemas de páncreas artificial o sistemas de infusión automatizada de insulina, incorporando una bomba de insulina (un sensor continuo de glucosa intersticial en tiempo real y un algoritmo que determina la cantidad de insulina que la bomba debe infundir en función de las lecturas realizadas por el sensor).

Además de las innovaciones tecnológicas, el presidente de la SED destaca el desarrollo de nuevos fármacos orales e inyectables (agonistas de receptor de GLP1, agonistas duales GLP1/GIP e inhibidores de la SGLT2) para el tratamiento de la hiperglucemia y las comorbilidades asociadas a la diabetes.

Estos fármacos han modificado en gran medida las estrategias de tratamiento de los pacientes con diabetes ya que, además de su efecto sobre control glucémico sin incrementar el riesgo de hipoglucemia, reducen el peso corporal y tienen efectos beneficiosos en la protección cardiovascular y renal. Además, "en el caso de los agonistas de receptor de GLP1 y los agonistas duales GLP1/GIP, por su efecto sobre el peso, podemos hablar de la posibilidad de alcanzar la remisión de la enfermedad a largo plazo", asegura Pérez.

Fuente: Correo farmacéutico